jueves, 16 de febrero de 2012

Jueves WTF

Me gustaría iniciar una sección los jueves (digo jueves porque hoy es jueves, podría ser un domingo) de videos o imágenes curiosas que me encuentre por internet. Como mi capacidad creativa en ocasiones suele ser bastante baja (como ahora) simplemente la llamaré "Jueves WTF" (burda de original).

Lo que publicaré aquí hoy lo encontré en el blog Microsiervos. El primero es un video de la fría Rusia, ese lugar que parece de la época de Charles Chaplin donde todo es blanco y negro (?). En ocasiones es difícil conducir cuando el pavimento está húmedo, imagina si en lugar de agua estás conduciendo sobre asfalto congelado y cuando tratas de adelantar a un camión que se hizo a un lado te encuentras con una gandola sin control aproximándose a ti.




El otro caso ya es en tierras hispanas. En España para ser más preciso. ¿No te ha pasado nunca que mandas solicitudes a la alcaldía (o ayuntamiento en el caso de España) para solucionar algún problema de la comunidad y te pelotean o no te dan respuesta?. Bueno, esto es lo que le sucedió al señor Mario López Sánchez, que, cansado por no conseguir respuesta, solicitó un presupuesto de 60 billones de euros para construir una 'Estrella de la Muerte' que orbite constantemente a 400Km de altura sobre Montijo, el pueblo que habita.

Aquí la solicitud del señor Mario:


viernes, 10 de febrero de 2012

Desde la Tribuna: Nuestro fútbol se desangra II

Cuando la semana pasada decidí titular este espacio “Nuestro fútbol se desangra” era con la metáfora de la salida de jugadores hacia el extranjero que definitivamente baja la calidad de nuestro torneo, lástima que en esta oportunidad tenga que hablar de sangre real, esa que empieza a correr con bastante frecuencia en nuestros estadios.

El fin de semana pasado hubo un incidente bastante serio en “La Carolina” en el estado Barinas, cuando un grupo de personas identificadas con las camisetas del Zamora FC se enfrentaron por más de media hora a los cuerpos de seguridad con un saldo final oficial de 30 heridos. Algunos incluso con heridas de balas.

Este es un tema que se ha tocado muchísimo últimamente, Maturín, Caracas, Valera, Barinas, Puerto la Cruz, San Cristóbal e incluso Mérida se han visto como protagonistas en este tipo de hechos violentos que siguen sin conseguir respuesta adecuada por parte de las autoridades de la Federación Venezolana de Fútbol.

Es muy fácil buscar culpables. De lado y lado siempre culpan al otro, queriendo dar una constante imagen de víctima sin importar que la misma plaza sea recurrente en estos hechos. Pero el verdadero problema es algo mucho más grande que el consumo de alcohol desmedido o incluso algún fanático con ínfula de algún ser invencible de esos que abundan por la TV.

El problema es la poca prevención, el nulo entrenamiento de los cuerpos de seguridad para estos eventos y, probablemente lo más grave, la constante pasividad (y en algunos casos complicidad) de las directivas de los equipos hacia los sectores violentos de sus barras.

Ante esto la FVF debe poner mano dura, el cierre de los estadios y las multas económicas (que no salen del bolsillo de los equipos) ya mostraron ser ineficaces en este tema. Debe sancionar donde realmente les duela a estos equipos, en lo deportivo. Descontar puntos en la tabla, pérdida de la categoría si se reincide, prohibición de fichajes por un período determinado de tiempo o incluso la desafiliación de cualquier competición asociada a FVF de ese equipo que permite que constantemente se violen las normas de un estadio de fútbol.

Muy cerca estuvo el incidente del fin de semana pasado de tener un muerto. Esperemos que no se tenga que llegar a eso para empezar a tomar con seriedad un tema que por años ha manchado este hermoso deporte en todo el mundo. El mejor reflejo es la tragedia de Egipto. No lleguemos a eso, estamos a tiempo de evitar una tragedia.

*Desde la Tribuna es una columna publicada todos los viernes en el Diario Ciudad CCS, de circulación gratuita.

viernes, 3 de febrero de 2012

Desde la Tribuna: Nuestro fútbol se desangra

El fútbol venezolano actualmente está viviendo una de sus mejores épocas en cuanto a exportación de jugadores al exterior. Tenemos representantes en las mejores ligas de Europa como la alemana o la española, tenemos a “Maestrico” González en River Plate de Argentina, Oswaldo Vizcarrondo está en uno de los grandes de México, tenemos representantes en Estados Unidos en la MLS, otros en Suiza con el Young Boys y pare usted de contar.

Esas salidas de nuestros jugadores hacia otras ligas sin duda suben el nivel de la selección nacional, una clara muestra es el papel que se hizo en la Copa América de Argentina o la actual posición que ocupan los nuestros en las eliminatorias al Mundial de Brasil 2014, pero la consecuencia que trae es que el nivel de nuestro campeonato baje de manera significativa.

Seamos realistas, que La Vinotinto esté disputando los lugares altos de la Eliminatoria junto a los mejores no necesariamente mejora nuestro campeonato. Una muestra clara de esto es cuando se quiere armar una selección fuera de fecha FIFA con futbolistas que militan en equipos de nuestro país y se ven demostraciones de un fútbol gris y muy lejos del nivel de aquellos que nos representan en el exterior. Esto es un tema muy delicado, y los equipos locales son responsables de esta baja de nivel de nuestro balompié.

El fútbol venezolano se ha convertido en una buena vitrina para los que quieran salir a Europa. Yohandry Orozco, Alexander González, Josef Martínez, Gabriel Cíchero y muchos otros han salido de nuestro fútbol directamente al viejo continente. Pero la constante imperiosa (y a veces absurda) urgencia de vender jugadores ha hecho que cualquier mínimo interés se convierta en una venta que pocos dividendos dejan a los clubes locales, lo que se convierte después en imposibilidad de desarrollar canteras o de fichar jugadores de peso en posiciones específicas.

El sangrado de jugadores al exterior sin duda favorece al desarrollo de nuestros jugadores, pero se debe empezar a valorarlos aquí, y, salvo alguna oferta considerable, darle salida que deje un beneficio lógico y coherente que permita que dicha institución crezca de forma sólida.

No hablo de tapar la carrera de los jugadores venezolanos, hablo de valorar lo que tenemos, de lo contrario los jugadores talentosos seguirán abandonado nuestro balompié en la primera oportunidad y el nivel del fútbol local seguirá descendiendo, convirtiéndose posteriormente en las bochornosas presentaciones que dio la selección nacional en sus últimos dos enfrentamientos en EEUU.